¿Qué es la dislexia?

Es un trastorno del aprendizaje, específico y persistente, que afecta tanto a la lectura como a la escritura.

Este trastorno complica por tanto el proceso de aprendizaje, manifestándose en la dificultad para memorizar o incluso distinguir letras o grupos de letras, desorden en la colocación de las mismas, etc.

Se trata además de un trastorno neuropsicológico con una gran carga hereditaria.

El rendimiento y la facilidad para llevar a cabo las actividades del día a día se encuentran por debajo de lo esperado para su edad y se traduce en situaciones cotidianas como que el niño o la niña en cuestión escriba palabras al revés o lea más despacio, desordene sílabas, etc.

¿Cómo saber si alguien tiene dislexia? Síntomas

Tener dislexia puede derivar además en una falta de autoestima de la persona que la padece, generando inseguridades y ansiedad. Y tal como sucede con cualquier otro trastorno, es fundamental una detección precoz.

Es importante además tener en cuenta el momento en el que se plantea hacer el diagnóstico, para evitar que este se haga demasiado pronto. Lo ideal es priorizar ese diagnóstico en la fase de aprendizaje, o una vez el niño o niña adquiere las habilidades del lenguaje escrito.

No obstante, es conveniente hacerle un seguimiento previo para estimular, comprender y apoyar al niño o niña desde el principio y a lo largo de todo el proceso. Esto evitaría, en gran medida, complicaciones a largo plazo.

En cuanto a los síntomas, los principales son: la dificultad en la comprensión lectora, la falta de exactitud o la velocidad lectora, siendo esta última inferior a la esperada.

Pero también las dificultades en el razonamiento, la escritura, la falta de orientación espacial o temporal, los problemas de memoria, etc. No obstante, y pese a que los que acabamos de ver son los más comunes, los síntomas de la dislexia pueden variar de una persona a otra.

Tratamiento

Como ya hemos visto, detectar y evaluar a tiempo nos va a ayudar a determinar las necesidades y a decidir el tratamiento adecuado para abordar la dislexia.

El logopeda es uno de los profesionales que ayuda a prevenir y tratar la dislexia. Después de la correspondiente evaluación, el logopeda determinará el tratamiento a seguir, siempre teniendo en cuenta la edad, los síntomas y otras condiciones del paciente.

Aunque en los adultos también nos encontramos con importantes problemas de dislexia, es habitual que se pongan de manifiesto y por tanto se aborden, desde la infancia. Cuando se trabaja con niños, es muy importante que las herramientas que vayamos a utilizar sean lo suficientemente motivadoras o entretenidas como para mantener el interés del niño o niña.

Existen diferentes componentes lingüísticos a tener en cuenta a la hora de determinar el tratamiento a seguir, como por ejemplo:

• Con respecto a la lectura, los procesos perceptivo, léxico, sintáctico y semántico
• Con respecto a la escritura, los procesos de planificación, sintácticos y motores.

Se practicará desde la lectura en voz alta para mejorar la velocidad y la fluidez, hasta la comprensión de lo que se está leyendo, el reconocimiento y el uso fonemas y un largo etcétera, cuyo objetivo será dotar al niño o niña que padece dislexia, de las herramientas necesarias para desenvolverse en la vida cotidiana con facilidad y naturalidad.

Será importante también la comunicación y cooperación entre logopeda, entorno escolar y entorno familiar.

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